19 diciembre 2007

HACIENDO BALANCE

HOLA A TODOS!!!!!!!! En esta oportunidad quiero rendirle homenaje a un GRAN HOMBRE EN MI VIDA, al que es muy difícil de olvidar por más que digan que EL TIEMPO HACE MILAGROS Y DA PASO AL OLVIDO.
Desde este mi espacio y con esta mi herramienta fundamental, la palabra, quiero hacerle llegar mi inmenso y eterno TE QUIERO.
Buena Semana.

LULITA

Lulita . Lulita

... Lulita, Lulita ta ta ta ta. Lulita, Lulita ta ta ta ta. Es la más bonita ta ta ta ta. Es la Lucianita ta ta ta ta.
Resuena en la mente y en el corazón siento una vos muy bajita que susurra estas palabras que forman parte de una canción que mi abuelo me había hecho cuando era pequeña. Temí no volver más a escuchar Lulita pero en un momento critico de la salud de mi abuelo al acercarme a darle un beso él las volvió a pronunciar como si fuera una despedida anunciada !LULITA¡ y sus manos que tomaron las mías con una fuerza que todavía no comprendo de donde salió.
Si, ese fue el regalo que me hizo Dios solo El y yo sabíamos cuanto anhelaba escuchar esa simple palabrita que para muchos no tiene casi significado. Hoy ya no me escuchaba o por lo menos eso dicen, igual tome fuerzas y en un momento que era solo nuestro, solo mi abuelo y yo, en vos muy suavecita para que nadie más que él me oyera comencé a cantar: ... Lulita, Lulita ta ta ta ta. Lulita, Lulita ta ta ta ta. Es la más bonita ta ta ta ta. Es la Lucianita ta ta ta ta. Y no se a donde llego esa melodía, pero tengo la certeza que llego al lugar donde yo quería que llegara: su corazón y Dios hizo de puente.
Ya puedo estar en paz, sentí que todo lo que le había pedido al Señor para mi abuelo se me había cumplido, y se que si ahora su voluntad es llevárselo con El no siento la sensación de que me lo esta robando, sino la plenitud de que me dejo todo.
No se si estas palabras tendrán sentido o por lo menos no lo tendrán para aquellos que me conocen poco.
Estoy contando en la forma que mejor lo se hacer, que es escribiendo, lo más maravilloso que pude ver en mi vida, porque como nunca, sentí que Dios vino a mi lado el viernes. Que vino en un momento donde yo lo creía lejano, un momento que creí que estaba tan ocupado que de mi no se acordaba. Pero así somos los seres humanos, desconfiados. Mira si Dios no se va a acordar de mi y me lo demostró de la forma más espectacular que existe solo diciéndome LULITA.

No hay comentarios.: